Balsa se especializa en el diseño y producción de objetos hechos de ratán natural, no sólo porque nos encanta su personalidad muy especial y característica, sino también por ser uno de los materiales más sostenibles en la producción de muebles: es renovable, tiene una producción de bajo impacto Es reciclable y ayuda a prevenir la deforestación de las selvas tropicales.
El ratán es una fibra vegetal silvestre clasificada como palma, de la subfamilia Calamoideae. A la vista, es una liana con espinas, se aferra a los árboles y puede alcanzar los 200 metros de largo. A veces el ratán se confunde con el bambú, pero son dos plantas muy diferentes: el ratán es fibroso, completo y flexible, el bambú es fibroso, hueco y rígido.
El ratán es esencial para el ecosistema tropical, ya que se aferra a los árboles y se convierte en un cable de comunicación para otras plantas y animales. En el mundo hay 13 tipos conocidos de ratán, con casi 600 variedades en total; el género Calamus sólo representa casi 400 variedades.
¿Por qué amamos el ratán?
Recursos renovables:
El ratán crece en sólo 5-7 años, lo que lo convierte en un verdadero recurso renovable. Las varillas de ratán son similares al bambú, aunque son más fuertes, ya que tienen un núcleo sólido.
Producción de bajo impacto:
La fabricación de muebles de ratán es de baja tecnología, lo que significa que no requiere productos químicos o consumo excesivo de energía.
reciclable:
Aunque bastante duradero, los muebles de ratán se pueden reciclar después de que su vida útil haya terminado. Como es un material natural, es 100% biodegradable.
protección forestal:
El ratán necesita árboles para crecer, ya que es una especie de vid, por lo que las comunidades que cultivan ratán tienen un incentivo incorporado para mantener los bosques en su lugar.
Balsa se especializa en el diseño y producción de objetos hechos de ratán natural, no sólo porque nos encanta su personalidad muy especial y característica, sino también por ser uno de los materiales más sostenibles en la producción de muebles: es renovable, tiene una producción de bajo impacto Es reciclable y ayuda a prevenir la deforestación de las selvas tropicales.
El ratán es una fibra vegetal silvestre clasificada como palma, de la subfamilia Calamoideae. A la vista, es una liana con espinas, se aferra a los árboles y puede alcanzar los 200 metros de largo. A veces el ratán se confunde con el bambú, pero son dos plantas muy diferentes: el ratán es fibroso, completo y flexible, el bambú es fibroso, hueco y rígido.
El ratán es esencial para el ecosistema tropical, ya que se aferra a los árboles y se convierte en un cable de comunicación para otras plantas y animales. En el mundo hay 13 tipos conocidos de ratán, con casi 600 variedades en total; el género Calamus sólo representa casi 400 variedades.
¿Por qué amamos el ratán?
Recursos renovables:
El ratán crece en sólo 5-7 años, lo que lo convierte en un verdadero recurso renovable. Las varillas de ratán son similares al bambú, aunque son más fuertes, ya que tienen un núcleo sólido.
Producción de bajo impacto:
La fabricación de muebles de ratán es de baja tecnología, lo que significa que no requiere productos químicos o consumo excesivo de energía.
reciclable:
Aunque bastante duradero, los muebles de ratán se pueden reciclar después de que su vida útil haya terminado. Como es un material natural, es 100% biodegradable.
protección forestal:
El ratán necesita árboles para crecer, ya que es una especie de vid, por lo que las comunidades que cultivan ratán tienen un incentivo incorporado para mantener los bosques en su lugar.
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